Hay otros argumentos importantes.
Algunos lo tratara Pili en este rincon que es el suyo.
Pili es la administradora del blog Cronica de Nervion.
Bienvenida Pili a Geneticamente Sevillista.
¡Hola amigos!
Qué mejor manera de comenzar un nuevo reto para mí, una nueva experiencia como es esta que tratando un tema que pienso es el que me trajo hasta aquí. Sí, os estoy hablando de la AMISTAD y porqué no, de la COMPLICIDAD.
Dicen los entendidos o mejor dicho los estudiosos de la materia que la amistad es una relación afectiva entre dos o más personas y que puede nacer a los pocos minutos de conocerse o con el paso del tiempo. Se dice que la amistad verdadera es la que dura toda una vida.
Esa es mas o menos la definición que encontrarías en cualquier diccionario si quisieras saber qué significa, pero en la práctica, en la vida real, en lo que todos y cada uno de nosotros vivimos y experimentamos quizás pueda ser algo diferente.
Pienso que cada cual acaba dándole el significado adecuado acorde a lo que uno en sí mismo, en sus relaciones con los demás ha llegado a experimentar.
Para mí sería muy complicado hablar de este sentimiento si no hablara desde lo que yo viví, desde lo que yo sentí ante este tipo de relación afectiva. Es sabido por todos que la manera de vivir y afrontar una situación depende mucho de la edad a la que se dé y la madurez que se tenga en ese instante. Cuando éramos niños, cuando la inocencia sobrepasa cualquier otra circunstancia todos los de nuestra clase eran nuestros “amigos”, hasta el que se burlaba de ti, porqué no. Cuando van pasando los años y la inocencia se queda aparcada a un lado todo se va tornando distinto.
Cuando llegamos a la adolescencia todo cambia. Comenzamos a conocer a personas de otras edades, de otros ambientes, de otros lugares y empezamos a movernos por intereses. Creo que es a esta edad a la que pensamos tener más amigos.
Los que me conocen bien saben lo importante que es para mí la amistad. Puedo decir que he tenido muchos colegas, compañeros, conocidos… pero también puedo decir que tengo amigos y que esos amigos son mi vida. La experiencia me dice que quizás haya ciertas circunstancias que te tocan vivir que hacen que puedas distinguir con más facilidad la amistad de lo que no lo es. He sufrido muchos desengaños. Gente a la que le dí mi alma por completo, por la que hubiera dado todo sin pensarlo dos veces… pero cuando más las necesité no estuvieron ahí. También en esos momentos descubrí a verdaderos amigos que aún habiéndolos conocido hace años no había sabido apreciar lo fieles que eran.
Y así, a base vivir mil y una historias es como una aprende a valorar si lo que tanto has amado, cuidado y respetado era sincero o no. Hoy en día tengo la suerte de contar con mucha gente por la que lo daría todo. Verdaderos amigos, más aún, cómplices de la vida, de mi vida, que sin apenas darme cuenta se instalaron en un rinconcito de mi alma. Ellos, mis amigos y mis cómplices, los que no puedo dejar de ver, con los que pasaría horas y horas hablando o sin hacerlo, a los que extraño cuando veo que me faltan, los que saben que en mí tienen una fiel compañera de viaje allá donde vayan; por ellos lo doy todo porque es por ellos, por tenerlos, por lo que me siento la mujer más afortunada del mundo. Los amigos, los que me conocen, los que me respetan y valoran, los que son sinceros y fieles a mi amistad, los que no fallan, los que siempre tendrán unos minutos para mi, los que vienen sin ser llamados, los COMPLICES de tus sueños, de tus miedos, de tus secretos, de tus sentimientos….Son mi vicio, mi droga, sin los que no pasaría ni un segundo de mi vida.
Los amigos de la vida que lo son de la tuya. Los que sabes que por mucho que pase el tiempo, por muchos obstáculos que os ponga la vida, por muchos kilómetros que os separen, los tendrás ahí, los sentirás cerca… porque a esos son a los que yo llamo AMIGOS.
Porque a los demás, no diré que no mereció la pena conocerlos porque mentiría, todos me aportaron algo, pero no estaban hechos para compartir tal grandeza conmigo.
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