En la tertulias de la:s cafeterías, en las barras, o en la puerta de un colegio, el tema de conversación es siempre el mismo;
QUIEN ES. O QUIEN NO ES.
Por todos los temas a tratar, siempre hay alguien que es más que el otro o viceversa.
En este post intentare tratar este tema en clave sevillista.
Hay miles y miles de sevillistas que por circunstancias de la vida no pueden sacarse el carnet. La crisis económico-financiera arrasa y cualquier padre de familia, con todo el dolor de su corazón y gustándole el Sevilla a reventar, antes de ver pasar a sus hijos necesidades, optan para reducir gastos.
En muchos casos por esta cuestión renuncian al carnet de su equipo del alma.
El dolor de estas personas, al no poder acompañar a su equipo semanas tras semanas, no poder disfrutar en el campo de su equipo, es tremendo. Púes, los sentimientos duelen.
Personas mayores, que han estado toda su vida llevando al campo, domingo tras domingo, a sus hijos y hasta a sus nietos, pregonando e inculcando sevillismo, ya no tienen suficientes recursos economicos para seguir siendo socios y acudir al RSP.
Muchísimas personas enfermas que jamás han podido pisar el RSP y solo han visto a su Sevilla en la tele. Ni han podido salir a la calle para compartir felicidad y llevar en volandas a su equipo en los triunfos.
Son muchos casos de sevillistas de corazón que no tienen su carnet de socio, pero que sienten los colores igual que todos.
Por otro lado nos encontramos con sevillistas que si puede pagar su abono año tras años con más o menos trabajo.
Hay sevillistas que, para acompañar a su equipo, pìden permisos en el trabajo, cambian turnos. Siguen a su equipo con mucho sacrificio, aun teniendo que pasar necesidades
Están los críticos, que por lo mas mínimo piden la dimisión o la expulsión de quien sea, sin mirar nada de lo pasado.
Están los conformistas u oficialistas, que pase lo que pase, están siempre apoyando a la directiva, agradecido por los triunfos y por la restructuración y modernización de las estructuras societarias.
Ser sevillista es como la vida misma. Cada uno a su manera.
Y aquí está el dilema. El falso dilema. O si queréis, la pregunta del millón;
¿Por qué unos se creen más sevillistas que otros?
¿Por qué algunos se creen con derecho a opinar y piensan que el otro tiene que callar o tener su mismo criterio?
¿Es más sevillista el que paga? ¿O el que por la dichosa vida debe renunciar a su abono?
Esto es el dilema.
Yo particularmente no me considero más que nadie en ningún aspecto de la vida.
Considero que nadie es más sevillista que otro.
De hecho aun no han podido inventar el SEVILLOMETRO, porque ninguna maquina es capaz de medir… SENTIMIENTOS....
3 comentarios. Comentar >>:
Me ha gustado mucho Encarni! Es una verdad como un templo. Hay miles de sevillistas y cada uno con sus circunstancias personales se ven obligados a estructurar su vida de una manera u otra y puede que el fútbol, porque aunque no lo parezca es un lujo, se quede fuera de las prioridades por mucho que nos duela. Yo sé lo que es no poder sacarse el carnet y lo que es tenerlo, y como tí pienso que hay miles de sevillistas que sufren, disfrutan, viven igual o más que nosotros el sevillismo. Nadie es mas que nadie nunca, y aquel que lo piense demuestra la ignorancia y la prepotencia de pensamiento.
Un beso
Ya te he dado la enhorabuena en tu blog, pero te la doy en el de Giulio también. Esperemos que esta máquina nunca se invente. jejeje
AMEN, AMEN Y AMEN. Un beso Encarni y para mi italiano la enhorabuena por los colaboradores.
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